NUEVA YORK. - Una dieta mediterránea tradicional con mucha presencia de aceite de oliva y verduras podría ayudar a los mayores a reducir el riesgo de sufrir diabetes del adulto o tipo 2, incluso sin calcular las calorías o perder peso.
Investigadores españoles que estudiaron a más de 400 adultos descubrieron que los que seguían la dieta tradicional tenían menos posibilidades de desarrollar diabetes después de cuatro años que los que consumían una dieta baja en grasas, según los hallazgos publicados en la revista Diabetes Care.
Una dieta mediterránea tradicional tiene generalmente un alto contenido en verduras, cereales ricos en fibra, legumbres, pescado y fuentes vegetales de grasas no saturadas -particularmente aceite de oliva y frutos secos- además de ser baja en carne roja y lácteos de alto contenido graso.
Para el estudio, investigadores liderados por Jordi Salas-Salvado de la Universidad de Rovira i Virgili en Reus, España, siguieron a 418 adultos de entre 55 y 80 años, que tenían al menos tres factores de riesgo para enfermedades cardíacas como ser hipertensos o fumadores.
Se les asignó de forma aleatoria una de entre tres dietas: una mediterránea con más énfasis en el consumo de aceite de oliva, la misma dieta centrada en conseguir grasas no saturadas de frutos secos y una dieta que reducía todo tipo de grasas.
A ninguno de los grupos se les pidió que limitaran las calorías o realizaran más ejercicio. Después de cuatro años, entre el 10 y el 11 por ciento de los dos grupos mediterráneos había desarrollado diabetes, frente al 18 por ciento de los participantes de la cohorte con una dieta reducida en grasas.
Cuando los investigadores incluyeron otro tipo de factores, como el peso del participante, el tabaquismo y los niveles de ejercicio que había comunicado, la dieta mediterránea en sí fue vinculada con el 52 por ciento de reducción del riesgo de diabetes frente a la dieta baja en grasas.
Los hallazgos respaldan los actuales consejos dietéticos para la gente con diabetes y los que tienen riesgo de desarrollarla, dijo Constance Brown-Riggs, portavoz de la Asociación Dietética Estadounidense, quien añadió que la dieta mediterránea es una opción sana para cualquiera. Sin embargo, Brown-Riggs aclaró que el estudio "no dijo, en ningún caso, que no se tenga que hacer ejercicio".
La experta también advirtió sobre prestar demasiada atención a las calorías o considerar al aceite de oliva como la panacea contra la diabetes. "De lo que estamos hablando es de un patrón de alimentación general, y de un estilo de vida completo", agregó.
Publicado el 15/10/2010
Fuente: Reuters
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